sábado, 5 de enero de 2008

NUTRICION MINERAL DEL CACAO


INGº. M.Sc. José W. Zavala Solórzano
Docente Principal de la Facultad de Agronomía-UNAS.

Extracción de nutrientes por el cultivo ambientalmente sostenible
La extracción de nutrientes por el cultivo de cacao se incrementa rápidamente durante los primeros 5 años después de la siembra y luego de establecerse manteniendo esa tasa de absorción por el resto de vida útil de la plantación. En general, el potasio (K) es el nutriente más absorbido por el cacao, seguido por el nitrógeno (N), calcio (Ca) y magnesio (Mg). La cantidad exacta de nutrientes removidos por un cultivo en particular depende del estado nutricional del árbol. En promedio 1,200 Kg. de semilla de cacao extraen 35 Kg. de N, 10 kg P2O5, 50 Kg. de K2O, 13 Kg. de CaO y 150 Kg. de MgO. Además, también se remueven nutrientes en la cáscara de la mazorca que es rica en K. Por otro lado, también se requieren nutrientes para construir el cuerpo del árbol. Todos estos factores deben ser considerados al diseñar una recomendación de fertilización en una plantación de cacao sostenible.

Síntomas de deficiencias nutricionales

Síntomas de deficiencia de potasio

Los síntomas de deficiencia de K aparecen inicialmente en las hojas más viejas y se acentúan con el desarrollo de brotes como consecuencia de la translocación del nutriente viejo a tejido joven. La translocación es de tal naturaleza que para el momento en que el brote joven se expande totalmente, las hojas viejas se caen. A medida que la deficiencia se acentúa, las hojas de los brotes y chupones son cada vez más pequeños.

En las hojas maduras los síntomas se inician como parches intervenales de color verde amarillento pálido ubicados cerca de los márgenes de las hojas, particularmente en la mitad distal. Luego estos parches se necrosan y permanecen en áreas pequeñas aisladas por cierto tiempo y luego se unen par formar un área continua en el borde de la hoja.

Generalmente, en una plantación deficiente en K se observan pocas hojas con los síntomas debido a que las hojas afectadas caen fácilmente del árbol. Antes de caer la hoja se vuelve completamente de color amarillo naranja, tal como se pudo evaluar en parcelas de Huayhuantillo, en agricultores Cacaoteros.


Síntomas de deficiencia de fósforo
Cuando existe deficiencia de fósforo (P) la planta crece lentamente por falta de raíces absorbente (pelos absorbentes) y las hojas, especialmente las más pequeñas no desarrollan. Las hojas maduras desarrollan un color pálido en los filos y en las puntas, mientras que las hojas jóvenes se tornan más pálidas que las venas. Más tarde se queman los filos de las hojas. El crecimiento nuevo tiene internudos cortos y las hojas se posicionan en ángulo agudo con relación a la rama. Las hojas maduras desarrollan un color verde muy oscuro. Las estipulas permanecen luego de que las hojas han caído.


Síntomas de deficiencia de nitrógeno

La carencia o deficiencia de N se manifiesta en reducción de la velocidad de crecimiento de las plantas. Una planta sometida a condiciones de deficiencia detiene su crecimiento en pocas semanas y rápidamente presenta enanismo. Los requerimientos de N están estrechamente relacionados con la intensidad de la luz bajo la cual crecen las plantas: al aumentar la luminosidad aumenta la intensidad del síntoma.
Cuando la sobre exposición a la luz induce una deficiencia de N se presentan áreas de color amarillo pálido entre las venas de las hojas, condición que parece estar asociada con una alta relación carbohidratos: N, Si no existe suficiente N para ser translocado de las hojas viejas a las hojas nuevas, las hojas bajeras toman una tonalidad uniforme verde pálida o amarillenta. Cuando la deficiencia es severa este color verde pálido uniforme afecta incluso a las nervaduras. Las plantas pueden permanecer en este estado durante largo tiempo.


Síntomas de deficiencia de azufre

Los síntomas de deficiencia de azufre (S) son a menudo difíciles de distinguir, debido a que se confunden con los síntomas de deficiencia de N. Los síntomas se presentan inicialmente en las hojas nuevas que desarrollan un color amarillento brillante incluyendo las nervaduras, sin embargo, no existe reducción marcada del tamaño de las hojas En las hojas viejas se presentan parches amarillentos de tono pálido, mientras que en las nuevas son inicialmente de color amarillo brillante e incluyen las nervaduras, las cuales pueden ser aún más claras, rasgo este que la diferencia de la deficiencia de N.
Posteriormente el brillo desaparece y la tonalidad es pálida y el síntoma aparece en todas las hojas. También aparecen necrosis apicales que luego se enrollan y finalmente las hojas caen.


Síntomas de deficiencia de magnesio

El síntoma típico de la deficiencia de Mg, aparece como una clorosis que comienza en las áreas cercanas a la nervadura central de las hojas más viejas luego de un tiempo el síntoma se difunde entre las nervaduras hacia los bordes de la hoja.

A medida que la carencia avanza los filos de las hojas entre las nervaduras se tornan pálidos y se inicia la necrosis por la fusión de las áreas afectadas. En casos severos de deficiencia se presentan áreas necróticas aisladas. Generalmente, se pueden observar una zona amarilla prominente que avanza delante de las zonas necróticas y la cual es generalmente, más brillante que en el caso de deficiencia de K.

Síntomas de deficiencia de calcio

Los síntomas de deficiencia de calcio (Ca) aparecen en las hojas más jóvenes, las cuales presentan parches necróticos que se inician como manchas blancas en la región cerca de los márgenes. Posteriormente estos parches pueden fusionarse para formar áreas necróticas marginales, las cuales son más extensas en las hojas de mayor edad. En casos de deficiencia severa ocurre una caída prematura de las hojas y muerte de los brotes y yemas. En las hojas más viejas la quemazón apical y marginal progresa rápidamente, dejando áreas sanas dentro de la zona necrosada. La deficiencia de Ca, causa disminución de crecimiento de la raíz.


Los síntomas de deficiencia de Ca se pueden confundir con las deficiencias de Mg, sin embargo, existen notorias diferencias. La deficiencia de Ca se presenta en las hojas nuevas mientras que en las de Mg aparecen en las hojas viejas. Cuando se presenta clorosis, la causada por la deficiencia de Ca avanza desde los bordes hacia la nervadura central, mientras que la de Mg lo hace en sentido contrario.

Síntomas de deficiencia de boro

La deficiencia de boro (B) afecta los puntos de crecimiento activo de la planta, por esta razón, los síntomas característicos se presentan en los tejidos más jóvenes, mientras que los tejidos de las hojas maduras aparecen sanos. Uno de los primeros síntomas en aparecer es una reducción en el tamaño de los entrenudos, acompañado de la formación profusa de chupones y de hojas encrespadas en las cuales se curva la lámina hacia el exterior y el ápice se enrosca.

Estas láminas se endurecen y se sienten gruesas al tacto aunque no adquieran una consistencia coriácea. Estas hojas pueden ser de color verde casi normal, pero también se pueden encontrar algunas de color amarillo verdoso pálido, con una tonalidad más oscura hacia la nervadura central y con márgenes ondulados. A medida que la deficiencia progresa, las hojas de los brotes nuevos se tornan cloróticas o casi completamente blancas, de tamaño reducido y forma anormal, con áreas crespas hacia el ápice que se retuercen en espiral. En los casos de deficiencia aguda los meristemos continúan diferenciando hojas pero éstas caen rápidamente y las que logran madurar son ásperas y quebradizas.

Posteriormente estas hojas pueden desarrollar zonas necróticas a lo largo de los márgenes y en algunos casos, en forma de pequeñas islas localizadas en los espacios intervenales. Este caso último se presenta cuando existe una deficiencia severa después de algún suministro o disponibilidad inicial en la fase avanzada, la punta de las hojas se necrosa mientras que el resto presenta color pálido.

El Boro es esencial para que la floración sea normal, en el caso de plantas deficientes se presentan anormalidades como floración profusa en el tallo principal y en las ramas y en ocasiones hinchamiento de los cojines florales, la deficiencia de Boro afecta la viabilidad del polen y el crecimiento de los tubos polínicos, afectando de esta manera la formación de las semillas y como consecuencia aparecen frutos Partenocárpicos o distorsionados que presentan puntos necróticos.

Cuando existe carencia de Boro, se pueden observar quebraduras en el tallo y las ramas de estos tejidos tienden a exudar. La suberización de los nervios es un síntoma característico de esta deficiencia.

Síntomas de deficiencia de zinc

Los síntomas de deficiencia de zinc (Zn) pueden observarse en la hoja en un estado temprano de su desarrollo y consisten principalmente en deformaciones foliares, cuya gravedad aumenta con los brotes sucesivos.


Los síntomas más útiles para diagnosis visual con las venas prominentes en las hojas muy jóvenes, la reducción en el ancho de la lámina foliar, el enrollamiento en espiral la presencia de clorosis en las nervaduras principales. En ausencia de esas deformaciones los síntomas son más difíciles de reconocer.

En ocasiones se puede observarse un patrón de nervaduras claramente visibles sobre un fondo clorótico.

En casos de deficiencia intermedia, la hoja puede presentar una proporción anormal entre el largo y el ancho y áreas cloróticas bien definidas a cada lado de la nervadura central. Puede también presentarse una distribución asimétrica de las áreas foliares a ambos lados de la nervadura central, lo cual da lugar a hojas curvadas en forma de hoz que también exhiben las áreas cloróticas características.

En casos más severos las nervaduras pequeñas de las hojas jóvenes se distorsionan mucho más hacia la parte basal de la hoja y las áreas intervenales toman un color pálido. El ancho de la hoja decrece progresivamente, los márgenes se tornan ondulados y la hoja entera se puede enrollar en espiral.

Síntomas de deficiencia de hierro

Los síntomas de deficiencia de hierro (Fe) aparecen primero en las hojas jóvenes. Primero se observa una clorosis intervenal marcada, mientras que las nervaduras permanecen marcadamente verdes. Cuando estas hojas maduran son más delgadas de lo normal y tienen consistencia similar al papel.

En casos de deficiencia severa las hojas presentan color blanco amarillento en la lámina y venas toman un color verde pálido. En el caso de las carencias de Fe, las necrosis aparecen en casos avanzados, en los cuales se presenta una quemazón bien marcada del ápice. Ocasionalmente se presenta una deformación de la lámina consistente en el desarrollo de indentaciones profundas quedan la apariencia de márgenes aserrados. Por lo general, este tipo de efecto se presenta cuando existe asociación de deficiencias de Fe, con Mg o con Ca. En algunos otros casos las hojas pueden ser ligeramente asimétricas.
El cacao es bastante sensible a la deficiencia de Fe especialmente en casos de mala aireación del suelo combinado con valores de pH superiores a 6.8.

PROPAGACIÓN DEL CACAO

Cultivo de Cacao

Ing. Ms Sc. Jorge Luis Adriazola del Aguila
Docente Principal de la Facultad de Agronomía-UNAS.
jladriazola@hotmail.com




El hábitat natural de las plantas de Cacao es el bosque tropical y por sus características morfológicas y fisiológicas es un árbol de tamaño mediano que se desarrolla bajo la sombra de otras especies arbóreas más grandes. Esta simple observación no indica que la planta de cacao es umbrofila y sus necesidades de sombra son muy grandes especialmente a nivel de plántula y en su fase juvenil.

El cacao difícilmente soporta el trasplante a raíz desnuda, y la experiencia nos indica que es necesario un recipiente que funciona como vivero y el cepellón con la planta asegura el prendimiento al trasplante.

Hace muchos años (antes que se descubra el polietileno) se usaba como recipientes para viveros de cacao, canastillas hechas con varillas de bambú, hojas de plátano, abacá, recipientes de barro, etc., porque el trasplante a raíz desnuda no daba buenos resultados.

Las necesidades de sombra de una plántula de cacao son grandes, y el porcentaje de sombra más apropiado está entre 70 % y 80 %. No tendremos éxito al manejar un vivero de cacao a pleno sol como puede hacerse con el café en algunas zonas nubladas.

Las semillas de cacao pueden pre germinar en el interior de un fruto sobre maduro, cuando el mucílago que las recubre se seca. Por el alto contenido de grasa que tiene la semilla, la capacidad de germinación se pierde rápidamente a partir del quinto día de su extracción del fruto, aparentemente la desnaturalización de las grasas afecta el embrión y lo mejor es sembrarla inmediatamente de su preparación.

Las semillas deben extraerse de los frutos más grandes, sanos y maduros, luego se preparan eliminando el mucílago que las cubre, restregándolas de preferencia con aserrín, también se puede utilizar ceniza o arena. Un kilo de semillas (aproximadamente 300 semillas) sin el mucílago se desinfectan mezclándolas con 5 gramos de Tiofanatemetil + Tiram en una bolsa, después de varias mezclas las superficies de las semillas entran en perfecto contacto con el funguicida asegurando así una buena protección.

La ceniza, muy fácil de encontrar en el ambiente del campesino, es una alternativa que debe promocionarse para desmucilaginar las semillas de cacao, por que la desprende fácilmente, y se adhiere sobre ellas protegiéndolas contra el ataque de hongos en el proceso de germinación. La ceniza contiene, además de otros macro y microelementos, calcio y magnesio que tienen capacidad de neutralizar el pH en el microambiente de la semilla lo que inhibe la proliferación de hongos y bacterias que prefieren un medio más ácido.

Para el transporte de semillas a lugares lejanos, cuyo destino demande más de 8 días de viaje y para asegurar su viabilidad, se colocan en una bolsa plástica con perforaciones que contiene un sustrato de aserrín desinfectado al horno a 72 ° C durante dos horas o hervido con agua. El aserrín debe estar ligeramente humedecido al 30 % (3 partes de aserrín mojado y 7 partes secas), en él se mezclan aproximadamente 500 semillas por bolsa, esto es 1,5kg por bolsa. En el interior y a un costado del sustrato se coloca una etiqueta de identificación, luego se dobla y se engrapa la bolsa. De esta manera la semilla puede viajar acomodándolas en cajas durante unos 12 días, durante este tiempo, gracias a la humedad de sustrato, empiezan a pregerminar evitándose su muerte. Apenas lleguen a su destino se siembran inmediatamente. Es posible que muchas semillas tengan las raicillas demasiadas largas y enredadas entre sí, para facilitar su desenredo, las bolsas sin abrir se sumergen en un recipiente con agua hasta que termine de salir burbujas lo cual facilita el desenredo.

La tierra que se va a utilizar como sustrato para llenar las bolsas se tamiza con una malla de 2mm de diámetro, luego se desinfecta con Dazomet con la dosis de 30 a 60 gramos por metro cuadrado a 20cm de profundidad de incorporación y se cubre con una manta plástica durante 6 días. Luego se remueve para airearla, y después de 4 días está lista para llenar las bolsas.

La tierra desinfectada se mezcla con 15 % de estiércol seco de vacuno o 5 % de gallinaza. Con este sustrato se llenan las bolsas plásticas perforadas (10 huecos en la base y los costados) de preferencia de color negro para evitar la proliferación de musgos; pero también pueden usarse bolsas de otro color e incluso transparentes. Un tamaño apropiado de las bolsas es de 30cm de largo por 12cm de ancho y 0,2mm de espesor.

Las bolsas se colocan juntas en hileras dobles separadas cada 20cm, en cada hilera se disponen 10 bolsas.

Las semillas grandes producen plantas más vigorosas que las semillas chicas. Semillas mayores de 2cm y de 1,95g de peso son preferibles a aquellas de menos de 2cm y 1,15g.

Las semillas se siembran con la parte más ancha hacia abajo o en forma horizontal y se las cubren ligeramente, procurando que apenas se noten en la superficie. La germinación de las semillas es irregular y pueden tardar entre 8 y 12 días provocando un crecimiento desigual en el almácigo. El riego debe hacerse cada 2 días, especialmente en las zonas secas, las malezas se eliminan a mano. No debe usarse herbicidas. Las plantas deformes o enfermas deben eliminarse y acomodarse las bolsas según el vigor de las plantas. Los cotiledones aportan nutrientes a las plántulas hasta los 60 días por lo que se recomienda que la aplicación de fertilizantes foliares recién deben hacerse a partir de los 2 meses de la siembra. Se debe fertilizar con 5 g de fertilizante compuesto 12-12-12 ó 0,5 g de nitrógeno, 1 g de fósforo y 1 g de potasio, al borde de la bolsa y no junto al tallo. Es conveniente, cada 15 días, aplicar por vía foliar urea al 0,75 % más oxicloruro de cobre al 0,2 % o cualquier fertilizante foliar líquido.

Para el control preventivo de enfermedades fungosas en el vivero se puede aplicar a modo de riego, alternadamente cada 15 días los siguientes funguicidas:
1° PCNB 3 gramos por litro
2° Benomilo 1 gramo por litro
3° Mancozeb 2-3 gramos por litro
4° Tiabendazol 2-3 gramos por litro


Para el control de insectos defoliadores como grillos, trips puede aplicarse Acephate, Deltametrina, o Carbaryl. En el caso de siembra directa en el campo definitivo, las semillas que recién están emergiendo casi siempre son atacadas por insectos y su control tiene que ser preventivo durante los 15 días de la germinación.

Es preferible que el transplante se haga a los tres meses de edad para evitar la torcedura de la raíz principal en el fondo de la bolsa. Si se va a injertar en las bolsas éstas deberán medir 40cm de alto por 15cm de ancho, medidas que aseguran mayor volumen de sustrato y aseguran la obtención de un plantón injertado en óptimas condiciones.

En las zonas con lluvias superiores a 3 000mm, el transplante puede hacerse en cualquier época del año, en zonas más secas es preferible hacerlo al inicio del período lluvioso.

El tamaño del hoyo para el trasplante debe ser de 40cm x 40cm x 40cm y la tierra del pozo se debe mezclar con 80g de superfosfato triple, o 100g de fertilizante compuesto 12-12-12; adiciones de materia orgánica siempre son benéficas para las plantas.

Los métodos para mejorar las propiedades del suelo dependen del sistema de producción que se adopte, por ejemplo el cultivo intensivo de cacao en suelos marginales, ácidos, con saturaciones de aluminio superiores al 45 % requieren la aplicación de enmiendas dolomíticas en niveles de 50g a 100g por hoyo, 2 meses antes del trasplante. Se ha encontrado que la inoculación de micorrizas del género Glomus en sustratos de cacao facilitan la absorción de fósforo, agua y otros nutrimentos escasos en suelos con exceso de aluminio. Una práctica aconsejable es adicionar al sustrato, raíces superficiales de kudzú (Pueraria phaseoloides) que es micotrófico obligatorio.




.DISTANCIAMIENTOS DE SIEMBRA

La densidad óptima de una plantación de cacao depende del régimen de lluvias, fertilidad del suelo, y si las plantas son obtenidas vegetativamente o sexualmente. Un distanciamiento de 3m x 2m (1 666 plantas/ ha) convendrá en clima relativamente seco (menos de 1 300mm) y con suelos pobres. Distancias de 3m x 3,50m (952 plantas/ha) será recomendable en zonas húmedas, con buena fertilidad del suelo. Una densidad intermedia entre 1 111 a 1 333 plantas por ha cuando se cultive cacao injertado.

La selección de una densidad de plantación esta ligado al contexto edafoclimático y criterios económicos, así una alta densidad favorece una rápida cobertura vegetal que limita la proliferación de malezas gramíneas que compiten con el cacao y que son difíciles de controlar si hay demasiada luz en el sistema de cultivo, esto indudablemente significa mayores costos en la instalación del cultivo.

En la Estación Experimental Tingo María experimentos de densidad iniciados en 1959, evaluaron el comportamiento del híbrido ICS1 x P7 obteniéndose los siguientes resultados:



Distancias N° de plantas/ha Rdto kg/ha/año
3.0 m x 3.0 m 1 111 2 322
2.0 m x 2.0 m 2 500 1 678
2,5 m x 2.5 m 1 600 1 641
4.0 m x 4.0 m 625 1 283




PRINCIPALES MÉTODOS DE PROPAGACIÓN VEGETATIVA
El tradicional método de plantación con híbridos que predomina en todo el mundo, en los últimos años, esta sufriendo una gran transformación con la adaptación de tecnologías de otros frutales tropicales como el mango, cítricos y otros que tienen éxito con el sistema monoclonal. En la última década, el uso de injertos de cacao ha dejado de ser exclusivo de los bancos de genes, semilleros y estaciones experimentales para constituirse como uno de las mejores medios para controlar eficazmente las enfermedades como moniliasis y escoba de brujas, además de ser utilizado para reemplazar plantas improductivas en el proceso de rehabilitación o renovación de plantaciones.

La precocidad de los injertos, la buena producción y menor incidencia de enfermedades en plantaciones nuevas, constituyen un gran atractivo para que los agricultores prefieran el cultivo monoclonal del cacao. Ante la nula promoción y producción de semilla híbrida de garantía, en el Perú se está prefiriendo la utilización de unos pocos clones, lo que redundará en una estrecha base genética y el riesgo que determinados clones en el corto plazo se vean afectados significativamente por nuevas plagas ante la escasa diversidad genética. Considerando que el cacao es una planta alógama, y la mayoría de los clones que se siembran comercialmente son autocompatibles, el riesgo de erosión genética empeora esta situación; sin embargo, es necesario recordar que la agricultura es un negocio como cualquier otro, en el que se incurre en riesgos y su éxito dependerá de su gerencia.

a. Principales métodos de injerto

El éxito del injerto depende de la práctica del operario y de su conocimiento en la obtención de las yemas y el momento de hacerlo. La operación de injerto implica poseer una planificación y logística que asegure su éxito, actividades improvisadas casi siempre fracasan por que no se toman en cuenta los factores climáticos, estado de la planta y las condiciones donde están. Casi siempre la falla esta determinada por la escasez de agua en el suelo, sustrato, y por consiguiente los tejidos internos de la planta no tienen la facilidad para unirse con la yema a injertar. Las condiciones óptimas para injertar se consiguen en un vivero, antes que en el campo definitivo.

Los métodos de injerto más comunes son: de parche, púa terminal, púa lateral, hipocotiledonar con parche o con púa lateral. La selección del método también obedece a criterios de costos y la disposición a asumirlos.

b. Enraizado de ramillas

El método más sencillo para obtener a gran escala material vegetativo selecto es el enraizado de ramillas terminales de plantas de cacao. Las ramillas de unos 45cm se cortan y se desinfectan en recipientes con cloro al 1 % luego se separan las mejores para cortar las ramas en bisel y cortando el 50 % de cada hoja. La porción intermedia de las ramillas son las mejores. Las sustancias que estimulan el enraizado son, el ácido indolbutirico y el ácido naftalenoacético, con 20gramos de ambos, mezclados en dos litros de alcohol al 50 %. Con esta solución se empapan algodones y en ellos se introduce la parte terminal de la ramilla por 5 segundos, inmediatamente se colocan inclinadas en el sustrato contenido en bolsa plástica. El sustrato debe estar compuesto de suelo franco o limoso, arena o cascarilla de arroz y estiércol de vacuno descompuesto. El lugar de enraizado debe tener 80 % de sombra, y ser capaz de retener 95 % de humedad relativa entre 24 y 28°C. La humedad del sustrato debe ser controlada por lo que se recomienda proveer de un techo plástico transparente. Las ramillas permanecen en este ambiente durante 4 o 7 semanas luego se les quita parcialmente la sombra (CRESPO, 1998).




c. Poda del cacao

El crecimiento de una planta de cacao debe estar determinado por los intereses del agricultor cacaotero. Desde que el cacao produce flores y frutos en el tronco y ramas primarias y secundarias gruesas, en lo posible debe orientarse la floración en estos tejidos. Los métodos de poda difieren si es una planta híbrida o clonal.

Una planta franca produce normalmente su verticilo aproximadamente a los 17 meses del trasplante y no es necesario poda alguna para inducir las ramas primarias. . La única poda consiste en eliminar los ejes ortotrópicos en la base del tallo y los que aparecen sobre las ramas primarias con la finalidad de mantener una sola copa. Durante el proceso de crecimiento de las plantas, luego del transplante, las hojas del tronco no deben eliminarse, más bien es conveniente asegurar que cumplan normalmente su ciclo de vida porque alrededor de la cicatriz que deja su caída, se forman los cojines florales. La protección del tronco frente a los rayos solares o cortes asegura la normal aparición de flores. Proveer de sombra adecuada en la plantación es lo más conveniente. Una vez que se han formado las ramas primarias en número de 4 a 6, se eliminan solamente las ramas más débiles y mal orientadas. Mientras más ramas primarias tenga la planta, habrá mayor superficie de tejido productivo. Las ramas secundarias deben estar alejadas 40cm del eje del tronco para evitar que se entrecrucen con las ramas primarias que forman la copa. La arquitectura de una planta es una característica genética que origina ramas primarias con ángulo muy agudo, dirigidas hacia arriba, y en otros casos las ramas tienden marcada tendencia horizontal, en este último caso las plantas presentan mayor formación de frutos y flores porque hay una mejor distribución de su savia. La poda de formación tiene por objetivo formar una copa equilibrada, cortando las ramas demasiado vigorosas o sin competencia, una copa muy densa dificulta el ingreso de luz y corrientes de aire. La escasez de luz produce menos floración y la concentración de humedad favorece la actividad de hongos fitopatógenos. Las ramillas en el interior de la copa deben eliminarse porque su capacidad fotosintética es casi nula y no aportan nutrimentos en la producción de frutos.

PODAS

a. Poda de formación de plantas injertadas
Las plantas injertadas por el método de parche, luego del trasplante crecen libremente formando varias ramas con orientación lateral durante más o menos un año. A partir del segundo año, las ramas primarias están muy juntas y tienen la forma de un abanico, es necesario seleccionar 3 ó 4 ramas primarias que constituirán el armazón de la planta. Por efecto de los cortes de ramas, muchas yemas vegetativas se activan y aparecen numerosas ramillas que se eliminan hasta lograr 3 ó 4 ramas primarias vigorosas en el tercer año. Las ramas secundarias se permiten crecer solamente a partir de los 80cm del suelo y se orientan hacia arriba Las ramas terciarias crecen libremente siempre y cuando no se entrecrucen con otras. Si alguna rama primaria crece demasiado se tiene que recortar para lograr el equilibrio entre ellas. Una planta injertada nos debe permitir transitar sin agacharnos en una plantación, y realizar labores culturales. Algunos clones, como el ICS95, requieren la colocación de tutores para levantar las ramas que tienden a crecer hacia abajo.




b. Poda de sanitaria

Es una poda que debe realizarse continuamente en una plantación de cacao, de su frecuencia dependerá el grado de incidencia de las enfermedades fungosas. El permitir que algún tejido enfermo permanezca en la planta pone en peligro la rentabilidad de una plantación nueva. La poda sanitaria es una actividad regular en la plantación y se debe realizar simultáneamente al momento de la cosecha semanal o quincenal. Se eliminan ramas, cojines florales con escoba de bruja, frutos con moniliasis, podredumbre negra y otros. Es conveniente recortar las ramas que se cruzan entre plantas manteniendo una distancia de 20cm entre copas.

CONTROL DE MALEZAS

Una plantación con la sombra adecuada solo permite el crecimiento de malezas de hoja ancha que son más fáciles de controlar que las gramíneas, muy comunes en áreas con exceso de luz. Con la finalidad de no alterar el hábitat de Forcipomyia en el estrato inferior del sistema cacao, es preferible el control de malezas con machete evitando en lo posible el uso de herbicidas.

MEJORAMIENTO DEL DRENAJE DE SUELOS

En las zonas con exceso de lluvias el terreno debe contar con un sistema de drenaje superficial que permita la eliminación rápida del agua. En casos extremos de lluvia, la construcción de camellones rectangulares que permitan el alineamiento de dos hileras de plantas sería lo más aconsejable; sin embargo, la construcción de un canal de desfogue implica extraer tierra de 1m a 1,50m de profundidad de escasa fertilidad, muy ácidos y arcillosos, que se colocan superficialmente en el suelo sembrado de cacao, de esta manera se afecta el normal desarrollo de las plantas. Lo más conveniente es hacer estos drenes en forma paulatina, haciendo canales de 1m de ancho y de 20 cm de profundidad cada año, sobre este suelo que se vuelca sobre la superficie del terreno se incorporan rastrojos, cáscaras de frutos, dolomita, estiércol descompuesto, roca fosfórica y otros fertilizantes.




ECOFISIOLOGIA DEL CACAO

Plantación del cultivo de Cacao

Ing. M.Sc. Fernando S. Gonzáles Huiman
Docente de la Universidad Nacional Agraria de la Selva, Tingo María-Perú
El Cacao (Theobroma cacao L.) sobrevive bajo sus condiciones naturales, gracias al equilibrio biológico existente en el medio donde crece, dicho equilibrio se puede alterar permitiendo a la planta desarrollar toda su potencialidad y dar sus mejores rendimientos, es decir, que en la medida que se logre una mayor adaptabilidad, respuesta al abonamiento y a otras prácticas en forma conjunta con la modificación del ambiente, se obtendrán mejores resultados con los materiales de alta producción potencial.

Para ello es indispensable conocer la ecología y fisiología del cacaotero, para determinar fácilmente el o los factores limitantes del crecimiento y desarrollo, permitiendo modificarlos o rectificarlos. Asimismo, conociendo los requerimientos y las limitantes del cultivo, se pueden determinar áreas potenciales al mismo.

En el establecimiento y manejo de plantaciones de cacao es importante considerar el factor ambiental que está muy relacionada con el crecimiento, la floración, fructificación y aparición de algunas enfermedades por lo que en la practica se hace necesario cumplir con requerimientos mínimos de precipitación, humedad relativa temperatura, luminosidad, suelos y altitud.

El cacao es una planta muy sensible a la falta de humedad del suelo por esto es importante una buena distribución de precipitaciones durante el año, considerándose que el mínimo dependerá de la zona si es muy lluviosa (3,500 mm/año) los suelos deben presentar un drenaje perfecto, la humedad relativa debe ser mayor al 70%. Los suelos más apropiados para el cultivo del cacao, son los suelos aluviales de textura franca (franco arcillo, franco arenosa o arenosa arcillosa); sin embargo, se ha observado una gran adaptabilidad a suelos en laderas con pendientes mayores a 25% aún con afloramiento rocoso en un rango muy amplio de reacción del suelo entre (pH = 4.0 – 7.5) por ejemplo en la localidad de Chambira, Juanjuí, departamento de San Martín se viene manejando plantaciones clónales con edad promedio de cuatro años y producción superior a 1000 kg/ha/año (ICT 2002) También se puede sembrar en laderas con manejo de coberturas establecidas a curvas de nivel.

El cacao es una planta que se cultiva desde el nivel del mar hasta (1,400 m.s.n.m), siendo de rango optimo entre 250 – 900 msnm; fuera de este limita las plantas sufren alteraciones fisiológicas que afectan el potencial productivo lo que se refleja en un menor rendimiento y baja rentabilidad para el agricultor.

FACTORES MEDIOAMBIENTALES
a. Temperatura
Las condiciones óptimas para la producción de cacao se encuentran entre 20 y 30 a 32 °C, con 25° C como temperatura media mensual óptima; sin embargo, para un crecimiento adecuado de la planta, algunos investigadores han fijado una temperatura mínima de 15º. En las zonas productoras donde no se observan cambios bruscos de temperatura en las diferentes épocas del año y donde la media es de 25º, se observa una producción casi continua de mazorcas de cacao; sin embargo, en zonas hacia los 1200 metros de altura pueden existir cambios de temperatura que afectan principalmente el crecimiento vegetativo, el desarrollo de los frutos y la floración.

Se ha observado que hay una correlación entre la temperatura baja y la reducción en el desarrollo del tejido leñoso o cambium y una baja intensidad de floración, así mismo, cuando hay una gran cantidad de frutos en la planta disminuye la floración debido, posiblemente, al efecto depresivo de la abundancia de frutos.La temperatura influye, en forma positiva, en el desarrollo de los frutos; se observa un crecimiento más rápido cuando las temperaturas son altas y se necesita un periodo más corto para la maduración del fruto entre 140 y 175 días; cuando los frutos se desarrollan en periodos fríos la maduración se prolonga hasta los 170 días. Este comportamiento fisiológico del árbol da una explicación clara sobre la prolongación de la cosecha en aquellas zonas alrededor de los 1200 metros, en donde se cultiva cacao.

En sí, el cacao no soporta temperaturas bajas, siendo su límite medio anual de temperatura los 21 ºC ya que es difícil cultivar cacao satisfactoriamente con una temperatura más baja. Las temperaturas extremas muy altas pueden provocar alteraciones fisiológicas en el árbol por lo que es un cultivo que debe estar bajo sombra para que los rayos solares no incidan directamente y se incremente la temperatura.

La temperatura determina la formación de flores. Cuando ésta es menor de 21 ºC la floración es menor que a 25 ºC, donde la floración es normal y abundante. Esto provoca que en determinadas zonas la producción de mazorcas sea estacional y durante algunas semanas no haya cosecha, cuando las temperaturas sean inferiores a 22 ºC. Cuando el rango promedio de la temperatura oscila entre los 21 y 25 ºC, durante el mayor tiempo que se da desde el cuajado hasta la maduración del fruto, mejora la calidad de los granos.
Las temperaturas extremas definen los límites de altitud y latitud para el cultivo de cacao. La absorción del agua y de los nutrientes por las raíces de la planta del cacao está regulada por la temperatura. Un aspecto a considerar es que a temperaturas menores de 15°C la actividad de las raíces disminuye.

Por su parte altas temperaturas pueden afectar las raíces superficiales de la planta del cacao limitando su capacidad de absorción, por lo que se recomienda proteger el suelo con la hojarasca existente. Del mismo modo, la rápida descomposición de la materia orgánica en el suelo a través de la oxidación y en presencia de la humedad está determinada por la temperatura.

b. Precipitación
El cacao es una planta sensible a la escasez de agua pero también al encharcamiento por lo que se precisarán de suelos provistos de un buen drenaje. Un anegamiento o estancamiento puede provocar la asfixia de las raíces y su muerte en muy poco tiempo. Las necesidades de agua oscilan entre 1500 y 2500 mm en las zonas bajas más cálidas y entre 1200 y 1500 mm en las zonas más frescas o los valles altos.

La disponibilidad de agua, junto con sus variaciones, durante la época del año, es el principal factor responsable de las diferencias en las producciones de cacao. Es importante tener en cuenta que una buena distribución de las lluvias es más conveniente para las relaciones ecofisiológicas y la producción de cacao, que una precipitación estacionaria en cualesquiera de los dos semestre. En aquellas zonas donde es muy prolongada la estación seca, y se concentran las lluvias en un corto tiempo, puede causar reducción de las cosechas por incidencia en la floración, cuajamiento de frutos y desarrollo de las mazorcas. Al comparar los datos de precipitación y temperatura con la producción de cacao en las diferentes regiones, se observa un ciclo de producción de frutos que sigue una curva más o menos estable para cada región en particular, sobresaliendo dos picos de cosecha durante el año, que coincide con los meses posteriores a las altas precipitaciones.
Precipitaciones que excedan los 2,600 mm. pueden afectar la producción del cultivo de cacao.

c. Vientos
Es el factor que determina la velocidad de evapotranspiración del agua en la superficie del suelo y de la planta. En las plantaciones expuestas continuamente a vientos fuertes se produce la defoliación o caída prematura de hojas.

La información del efecto de este factor sobre la producción y el comportamiento fenológico del árbol, es muy escasa; sin embargo, se ha observado a través de algunas investigaciones desarrolladas, que algunos cultivares tienen tolerancia a las corrientes de aire y su consecuente pérdida prematura de las hojas. En el cultivo de cacao queda muy difícil separar el efecto de los vientos de la radicación solar ya que el sombrío interfiere, profundamente, en estos dos factores.

El principal efecto de los vientos sobre el árbol de cacao es provocar una caída prematura de la hoja con su consecuente defoliación posiblemente a causa de la pérdida excesiva de agua y daño mecánico. Como ya se dijo, el efecto de los vientos está muy correlacionado con el tipo de sombrío, recomendando la implantación de aquellos que causen un efecto favorable en las épocas iniciales de desarrollo que proteja a las plantas de los vientos y de la radiación solar. Por lo general, se estima que los niveles de radiación solar superiores a 250 cal. cm-2. día-1 (calorías por centímetros cuadrado por día), causan pérdidas hasta del 23% en su producción cuando se protege en forma lateral el cultivo de cacao con sistemas de barreras y, de sólo el 2.6% de pérdidas cuando el cultivo se protege del viento y contra la radiación solar, lo cual sugiere que las plantaciones de cacao se deben proteger contra el viento y las altas radiaciones solares.

Los vientos continuos pueden provocar un desecamiento, muerte y caída de las hojas. Por ello en las zonas cacaoteras es preciso el empleo de cortavientos para que el cacao no sufra daños. Los cortavientos suelen estar formados por distintas especies arbóreas (frutales o madereras) que se disponen alrededor de los árboles de cacao.

En plantaciones donde la velocidad del viento es del orden de 4 m/seg., y con muy poca sombra, es frecuente observar defoliaciones fuertes. Comparativamente, en regiones con velocidades de viento del 1 a 2 m/seg. no se observa dicho problema.
d. Sombra
El objetivo del sombreamiento al inicio de la plantación es reducir la cantidad de radiación que llega al cultivo para reducir la actividad de la planta y proteger al cultivo de los vientos que la puedan perjudicar. Cuando el cultivo se halla establecido se podrá reducir el porcentaje de sombreo hasta un 25 o 30 %. La luminosidad deberá estar comprendida más o menos al 50 % durante los primeros 4 años de vida de las plantas, para que estas alcancen un buen desarrollo y limiten el crecimiento de las malas hierbas.Para el sombreo del cultivo se emplean las llamadas especies para sombra, que generalmente son otros árboles frutales intercalados en el cultivo con marcos de plantación regulares.

Los conceptos y conocimientos de las relaciones entre las radiaciones solares y los efectos fisiológicos sobre el cacao ha tenido gran evolución en los últimos años y, por lo, tanto existe literatura con conflicto en las opiniones relacionadas con el papel desempeñado por el sombrío. No se debe olvidar que la planta de cacao es una especie típica de penumbra y que existen conceptos encontrados acerca de la tolerancia de la planta a la sombra y que esta especie se clasifica obligatoriamente como una planta de solana o sea que su mayor desempeño fisiológico se obtiene bajo sombrío. La experiencia en la zona central y en la zona de sur del país, ayuda a clarificar el concepto de que no se pueden establecer plantaciones de cacao a plena exposición solar, que coinciden con las experiencias encontradas por algunos investigadores en el desarrollo de plantaciones sin sombrío; sin embargo, sea la oportunidad de hacer referencia de lagunas experiencias de plantaciones desarrolladas en el Ecuador donde existen microclimas de baja intensidad de luz y bajo potencial de evapotranspiración con protección contra los vientos en donde algunos cultivares de cacao se desarrollan en forma eficiente.

Cuando las plantaciones se desarrollan a plena exposición con precipitaciones adecuadas y se les proporciona nutrientes de acuerdo con las exigencias y se protegen de los vientos, producen mayores volúmenes de cacao que aquellos cultivados bajo sombra en las mismas condiciones debido a la alta intensidad de fotosíntesis, pero la planta tiende a reducir sus producciones con un rápido envejecimiento. Desde este punto de vista, la explotación de cacao en aquellas zonas de fertilidad natural alta y con un flujo de capital adecuado puede tener una alta sostenibilidad económica, pero no se debe olvidar que el cacao, a plena exposición, puede causar daños por ataque más severos de insectos y algunos patógenos, siendo necesario un control frecuente de estos.

Teniendo en cuenta estos factores se deben recomendar los sombríos bajo el concepto ecológico y económico, interrelacionándolo con aspectos agronómicos y fisiológicos puesto que un sombreado moderado tiene ventajas que contribuyen a mejorar la estabilidad ecológica produciendo condiciones adecuadas para la reproducción y desarrollo de insectos polinizadores cuya escasez es supuestamente uno de los factores responsables de la baja productividad.

Sabiendo que la radiación solar varía en forma considerable, en todas las zonas cacaoteras por estar cerca al trópico y por las posiciones fisiográficas de las plantaciones, se debe poner especial atención al establecimiento de sombríos definitivos y permanentes, su orientación y especies utilizadas.

El desarrollo de los trabajos realizados por la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria muestran que en la instalación del cultivo se deben plantar sombríos temporales de plátano, yuca y leguminosas arbóreas de rápido crecimiento que contribuyen a mejorar las condiciones ecológicas produciendo un microclima favorable dentro del cultivo, además de mejorar las condiciones de suelo e incrementar los rendimientos económicos.

Los sombríos permanentes se deben sembrar junto con los sombríos temporales utilizando maderables nativos de alto valor económico como cedros, nogal cafetero, caoba a una distancia entre 15 y 21 metros o, frutales a una distancia de 9 m, orientando las siembras en sentido sur – norte para proteger las plántulas de cacao de la radiación solar, durante las primeras y últimas horas del día.
Ventajas del sombreamiento en los cacaotales
  • Regula la cantidad de luz a entrar dentro de la plantación, protegiendo a las hojas contra el efecto directo del sol, evitándose el quemado foliar.
    § Proporciona condiciones ambientales más estables, regulando la temperatura en el interior del cacaotal, lo que permite una descomposición de la materia orgánica en forma más lenta y por ende se disminuye el rango de temperatura diaria.
  • Al interceptar la lluvia, previene la erosión y la pérdida de fertilidad del suelo, favorece la infiltración, mantiene la permeabilidad y aireación, ya que el cacao por sí mismo no asegura una cubierta suficiente.
  • Debido a la reducción de la temperatura favorece un aumento de la H.R. (caso de zonas más áridas).
  • Se disminuye la pérdida de agua por transpiración, esto se debe a que se reduce la presión de vapor dentro de la hoja con relación con la de la atmósfera.
  • Disminuye la evaporación del suelo, conservándose la humedad en ellos.
  • Mantiene en cierto grado un control de las malezas.
  • Asegura una producción que sin alcanzar los rendimientos óptimos, permite una buena rentabilidad de la explotación.
  • Disminuye la incidencia de algunas enfermedades (Phytophthora y Moniliophtora) y principalmente de insectos plaga (Trips).
  • Permiten un mejor aprovechamiento de los fertilizantes, ya que los que se perderían por lixiviación son aprovechados por los árboles de sombra, de raíces más profundas. Además, depositan hojas, flores y ramas, lo que mejora las propiedades físicas y químicas (materia orgánica) del suelo. La especie Erythrina, solamente con las flores, aporta entre un 3 a 6% de N, proporcionando al suelo el equivalente de unos 22,5 Kg/ha de N. Otras plantas proporcionan sub-productos como madera, frutas, aceites y fibras.
  • Desventajas del sombreamiento.
  • Disminuye o frena la producción, la cual sería mayor a plena exposición solar, pero esto ocurriría siempre y cuando todos los elementos minerales existan y estén disponibles, haya buena suplencia de agua y exista un buen control de plagas, malezas etc.
  • Pueden transmitir plagas y enfermedades.
  • Si presentan raíces superficiales, competirían, con el cacao, por agua y nutrimentos del suelo.
  • Contribuyen a la perdida de agua por transpiración.
  • El reventamiento (flush) de las yemas y la formación de nuevas hojas son menos frecuentes.
  • Pueden caer ramas y/o el árbol completo sobre los cacaos.
e. Luminosidad
La luz es otro de los factores ambientales de importancia para el desarrollo o morfología y en la fisiología del cacao, especialmente para la fotosíntesis, la cual ocurre a baja intensidad aún cuando la planta este a plena exposición solar; en éste último unto los efectos de la radiación solar pueden considerarse bajo dos aspectos principales, los efectos térmicos y los de iluminación.

En la etapa de establecimiento del cultivo de cacao es recomendable la siembra de otras plantas para hacer sombra, debido a que las plantaciones jóvenes de cacao son afectadas por la acción directa de los rayos solares.

Para plantaciones ya establecidas, se considera que una intensidad lumínica menor del 50% del total de luz limita los rendimientos, mientras que una intensidad superior al 50% del total de luz los aumenta.
Dentro de los efectos de la iluminación directa podemos mencionar que afecta tres procesos importantes de la planta, los cuales son: la fotosíntesis, el movimiento de los estomas y la expansión celular de ciertos tejidos.

f. Altitud

El cacao crece mejor en las zonas tropicales cultivándose desde el nivel del mar hasta los 800 metros de altitud. Sin embargo, en latitudes cercanas al ecuador las plantaciones desarrollan normalmente en mayores altitudes que van del orden de los 1,000 a 1,400 msnm. La altitud no es un factor determinante como lo son los factores climáticos y edafológicos en una plantación de cacao. Observándose valores normales de fertilidad, temperatura, humedad, precipitación, viento y energía solar, la altitud constituye un factor secundario.


FISIOLOGÍA DE LA PRODUCCIÓN

Desde el punto de vista fisiológico, la capacidad productiva de cacao está controlada por tres factores: capacidad de la fuente de fotoasimilados; tamaño de la fuente de los mismos y distribución en los diferentes órganos de la planta.
La capacidad fotosintética de la planta de cacao se mide por la cantidad de CO2 absorbida por la superficie de ha hoja en la unidad de tiempo (mg de CO2 m-2. S-1), la cual vería con la edad, posición y tipo de hoja. La planta de cacao tiene una tasa fotosintética relativamente baja (0.10 – 0.15 mg CO2.m-2. S-1) en comparación con otros géneros como caucho, Hevea brasiliensis 0.40 – 0.55 mg CO2 m-2. S-1; algodonero Gossypium hirsutum 0.20-0.40 mg CO2 m-2 S-1; Nicotiana tabacum 0.47-0.53 mg CO2 m-2. S-1.

Como se comentó anteriormente las hojas del cacaotero tienen varios estados de crecimiento durante su periodo de vida y su máximo potencial fotosintético a una edad aproximada de 20 días. El tamaño de la fuente de fotoasimilados o sea la capacidad que tiene la planta para producir los carbohidratos, está relacionada en forma directa con la arquitectura de la planta, volumen de la copa, la cual se expresa con frecuencia por el índice de área foliar (IAF), que es la relación entre la sumatoria del área foliar de todas las hojas de la planta y el área ocupada por la planta.

A medida que el índice foliar es mayor, la planta tiene mayor capacidad fotosintética y por tanto, tendrá mayor capacidad para elaborar carbohidratos, producir mazorcas y emitir hojas nuevas.

Al analizar los diferentes clones se observa que existe una gama de tamaño de hojas, arquitectura de la planta que le genera la capacidad para realizar la fotosíntesis y producir carbohidratos y almacenarlos en mazorcas y tejidos.

En estudio de diferentes clones e híbridos de cacao desarrollados por Muller, Alvim y otros investigadores, ponen de manifiesto que los índices de área foliar varían entre 1.37 y 5.6. Este concepto se debe tener en cuente cuando se vayan a realizar las podas, puesto que, en la medida que la planta tenga una buena arquitectura y un índice de área foliar alto, tendrá, mayor capacidad para elaborar fotoasimilados.

La distribución de los carbohidratos producidos en los sitios de fabricación que son las hojas y la distribución hacia los sitios de crecimiento, brotes, flores, entre otras, y sitios de almacenamiento, se conoce como la capacidad que tienen las plantas de cacao para acumular elementos producto de la fotosíntesis.Se ha observado que la traslocación de fotoasimilados está relacionada, en forma indirecta, con la capacidad que tiene los cultivares para almacenar los carbohidratos en los frutos y relacionado con un problema fisiológico conocido como secamiento prematuro de los pepinos el cual se caracteriza por el amarillamiento, marchitamiento y momificación de los frutos jóvenes; éste es controlado por un mecanismo interno de la planta debido, posiblemente, a la competencia de fotoasimilados entre las hojas y los frutos nuevos o, a la competencia interna de los frutos de edades diferentes; cualquiera que fuese su causa no se debe confundir con una enfermedad causada por patógenos y se debe tener en cuenta que cualquier condición que reduzca la disponibilidad de fotoasimilados para la planta como reducción de capacidad fotosintética o inhibición de la traslocación también puede aumentar la ocurrencia de secamiento de pepinos.